Por Mauro Grande
“Lo que pasa afuera es otro tema”, expresó el actual vicepresidente y director deportivo del Club Atlético Boca Juniors Román Riquelme días atrás para proteger, una vez más, al delantero de Boca, Sebastián Villa, quien se encuentra oficialmente imputado por abuso sexual. Después nos preguntamos porqué las víctimas de violencia de género, abusos o violaciones demoran en presentar la denuncia, cuando hay personas como Riquelme que abrazan al violento y atacan de manera (in)directa a las víctimas.
Primer tiempo
El primer tiempo del partido de la impunidad del colombiano Villa se jugó el 27 de abril del 2020 mientras el aparato productivo del fútbol estaba parado. Daniela Cortés, ex pareja de Sebastían Villa se presentó a realizar una denuncia y en las pruebas, que también salen a la luz en las redes sociales, se muestra que el colombiano la golpeó y amenazó de muerte. “Este es el verdadero Sebastián Villa, el que maltrata mujeres, porque no he sido la única”, escribió Daniela en redes sociales. A pesar del intento de Villa de que esto no llegara a términos judiciales, Cortés prosiguió en la justicia y consiguió que, en octubre de 2021 la causa fuera elevada a juicio oral. La carátula: “violencia de género”.
Por otro lado, el 12 de agosto del mismo año la comisión directiva de Boca Juniors, aprobó un protocolo para la actuación ante casos de violencia de género, orientación sexual y/o identidad de género, dándole facultades al club de dictaminar sanciones que van desde la amonestación a la suspensión, cesantía o expulsión del denunciado.
Pero todo quedó en papeles, porque cuando Villa fue legalmente procesado no se lo amonestó, ni le aplicaron ninguna penalidad. Sin importar que el poder judicial había considerado que tenía elementos suficientes para estimar que el imputado podía ser culpable de haber cometido el delito y encuadró al delantero dentro de un juicio por violencia de género, el club miró hacia otro lado.
Sebastián Villa volvió a salir a la cancha con total impunidad. Boca comenzó a tener un buen rendimiento que lo llevó a pelear por el título local y la Copa Libertadores con Villa como figura principal de casi todos los partidos.
Cuando la causa avanzó, el jugador Sebastián Villa se escapó a Colombia levantando sospechas de que estaba evadiendo la justicia ante las pericias que comprobaban que Daniela Cortés había sufrido abusos y violencia. Cuando se supo de la elevación a juicio, ya con Villa nuevamente en el país, poco importó y continuó con su descarada desfachatez en redes sociales.
En 2022, Villa comenzó solamente jugando el campeonato local, ya que en la Copa Libertadores quedó suspendido por seis fechas luego de arrojar objetos en una pelea cuando fueron eliminados por el Atlético Mineiro en Brasil. Su nivel fue alto, sus corridas y goles maravillaron al público y al periodismo. Una vez más, caso omiso a que está procesado por abusar y amenazar a su ex-pareja.
En marzo de este año, asumió como tercera vicepresidenta de Boca Juniors la vocal Adriana Bravo. Esto sucedió tras el fallecimiento del dirigente Roberto Digón. Las palabras de lxs periodistas que cubren al club en su día a día fueron que “con ella viene una aplicación estricta del protocolo de género”.
Antecedentes de violencia en el fútbol
A los meses de la asunción y promesa de Bravo, Eduardo Salvio se vió envuelto en una denuncia de su ex-mujer en la que lo acusa de que intentó atropellarla. Aparecieron videos y se abrió una causa de investigación. Se habló de la presunción de inocencia, pero desde agosto de 2021 que el club tenía la potestad de, entre otras sanciones, separar al jugador de la actividad profesional y que no actuara en los partidos, hasta que se resolviera su situación en la justicia. Lo qué pasó: no participó en el primer partido luego del hecho. Pero a los pocos días estaba entrenando y de vuelta en la cancha.
En otros casos de impunidad como el de Villa, en el año 2019, la pareja del delantero Jonathan Cristaldo (Churry) denunció que el entonces jugador de la Academia, la había golpeado y amenazado. En ese mismo instante desde Racing Club, comandado por Víctor Blanco, se puso en marcha un protocolo que llevó a que el delantero sea apartado del primer equipo, no se entrene con sus compañeros y que culminó con el vencimiento de su contrato para irse libre.
El paralelismo terminó en una diferencia judicial: mientras la primera denuncia contra Sebastián Villa fue elevada a juicio, la de Cristaldo fue archivada y el jugador pronto comenzó a jugar en Newell’s aunque su participación fue casi nula y hoy ya ni pertenece al club rosarino.
Segundo tiempo
El 14 de mayo Racing y Boca se enfrentaron en la semifinal de la Copa de la Liga para definir quién iba a ser el primer finalista. El día anterior, los noticieros y radios habían dado a conocer una nueva denuncia contra Sebastián Villa. Esta mucho más grave que la anterior: abuso, violación e intento de homicidio. La denunciante declaró que el hecho ocurrió en julio de 2021 pero que el miedo y lo sufrido la llevó a demorar en presentarse ante la justicia.
En las redes comienza a circular el rumor de que todo se trataba de un intento de embarrar la cancha porque Villa generaba peligro en los partidos. Igualmente el delantero fue titular aunque su desempeño no fue el que venía demostrando. El partido terminó 0 a 0 y fueron a penales.
Una observación que vale la pena mencionar, es que fuera de las usuales chicanas de cancha, durante el partido, cada vez que Villa tocaba la pelota era reprobado por todo el público de Racing y algunos de Boca. A la hora de ejecutar su penal lo acompañó de fondo un cántico: “el que no salta es un violín”. Pese a esto Villa metió su tiro y en una pose pedante miró a la hinchada, les pidió silencio e infló el pecho.
La cronología del caso Villa sigue: el 16 de mayo de 2022, se anunció con bombos y platillos que Juan Román Riquelme iba a hablar con Equipo F de ESPN. En un momento de la charla le preguntaron por la actualidad del equipo y, mientras nombraba jugador por jugador, hizo una pausa especial para referirse a su comodín: Sebastián Villa. En palabras del ex-jugador y vicepresidente, se mostró agradecido con el colombiano: “En estos dos años que estamos en el club solamente podemos tener un agradecimiento con Sebastián por su comportamiento profesional, jamás se tiró en una camilla y pidió atención, si no que demostró ser un atleta, un gran atleta” y continuó “es el mejor jugador del fútbol argentino, ya lo había dicho antes y lo vuelvo a decir”. La peor declaración fue: “lo que pasa fuera de la cancha es otro tema”.
Mientras Riquelme alabó y puso bajo su manto protector a Villa, la denunciante continuó con el proceso de llevar pruebas y presentar testigos. El 17 de mayo por la mañana se expusieron conversaciones por chat en la fiscalía en donde se demostraba que Villa reconocía que había hecho lo que la joven denunció y le pedía perdón.
Durante la rueda con los periodistas del panel de Equipo F, ningunx repreguntó sobre la situación judicial de Villa o con respecto a lo que estaba sucediendo con la víctima. Al mismo tiempo, Riquelme volvió tendencia en redes a la periodista Morena Beltrán quién fue duramente criticada y burlada por seguidores xeneizes porque el vicepresidente le respondía de manera altanera.
Pasaron los días y el 19 de mayo en las redes sociales del azul y oro se publicó un saludo por el cumpleaños número 26 de Sebastián Villa. Con el correr de las horas y teniendo más información sobre la nueva denuncia, a su vez las redes actuaron como canalización del repudio. En las publicaciones comentaban desde la falta de tacto, hasta el pedido de que Villa sea apartado y encarcelado. Después del rechazo en las redes, por la tarde, se confirmó que ante esta nueva denuncia el delantero fue imputado por “abuso sexual” y se solicitaron pericias psicológicas y psiquiátricas a la víctima.
Al conocerse esta información, y lejos de calmar la tormenta, Villa en su cuenta de Instagram subió un posteo en el cuál decía “el lobo siempre será el malo si quien cuenta la historia es Caperucita”. Una vez más el delantero ostentó su violencia, aduciendo que la denunciante busca difamarlo. Había tenido, en un intento de defensa, ganas de reclamar haber sido extorsionado para que esta denuncia no salga a la luz. Pero los chats mencionados demostraron que quien quiso extorsionar a la víctima para callarla fue él, quién le ofreció cinco mil dólares.
Fue tal el escándalo por el saludo al delantero y mucho más tras su imputación que la vicepresidenta de Boca, Adriana Bravo amenazó con renunciar mostrando un total desacuerdo con el manejo de la Comisión de Fútbol y especialmente de Riquelme con la denuncia contra Villa. Igualmente Bravo tomó la decisión de continuar en el cargo y tras unos días de silencio subió un comunicado en el que informó que se estaba ayudando a la víctima y que el club puso a disposición lo solicitado por la justicia.
En la final entre Boca y Tigre, con la imputación de Villa, desde el club no emitieron ningún comunicado, Riquelme no salió a pedir disculpas por revictimizar a la denunciante y lograr que sus seguidores la ataquen por “busca plata”. Por otro lado, el delantero jugará como titular. Mientras haya un título en juego, no importa (según Boca) que haya una chica sufriendo por violencia de género.